7 consejos para hacer fotos en verano a tu perro
El verano es agua, es calor y es naturaleza, y dentro de este marco he preparado unos consejos que te van a ayudar a hacer unas fotos muy chulas, y a que tu perro esté cómodo y feliz.
1 – ESCOGE MUY BIEN LA HORA
El verano es todo lo que he dicho antes, pero también es equivalente a espacios llenos de gente, sofoco, poca distancia, ruidos… Por esta razón es necesario que pensemos muy bien cual es el horario óptimo para sacar a nuestro perro a espacios de este tipo.
Los perros no tienen esa necesidad de tostarse al sol, por eso yo evito llevarlo a horas centrales del día a una playa, y prefiero que sea a última hora cuando bajemos a disfrutar del mar y de la arena.
Mi experiencia con las playas caninas no ha sido muy positiva. Las que he visitado son pequeñas, donde el perro ha de permanecer atado, y sin mas sombra que la que lleves contigo, así que no es una de mis opciones favoritas.
Ir a la última hora del día es genial, porque hay muchísima menos gente, baja la temperatura, y para perros, como el mío que pueden sufrir de incomodidad si ven perros cerca, la distancia es necesaria y es algo que nos proporciona el pisar la arena a partir de las 19h.
Pero en cuestiones fotográficas que son las que ocupan a este blog, cuando el sol está en su cénit, es decir, en esas horas centrales del día donde el astro rey cae sobre nuestras cabezas como una losa, no ofrece la calidad de luz mas bonita.
Se producen unas sombras extrañas en su lado opuesto, es decir el sol viene de arriba y la sombra cae abajo: Traducción: El sol ilumina tu frente y te hace ojos de mapache.
A las 19h en verano, al menos en esta latitud, el sol ya ha bajado bastante, ofreciendo una menor radiación, y una luz con una dirección mas angular.
RESUMEN:
A última hora de la tarde, tu perro está mas cómodo, y la luz es mas bonita.
Si quieres saber más del golpe de calor en perros, hace poco escribí un artículo en una revisa hablando de este tema. Te dejo el enlace aquí.

2 – Aprende a ver los reflejos
Quizá no te hayas fijado nunca, porque nuestra manera de ver humana rara vez cambia de perspectiva si no la forzamos. Pero si te tumbas en el suelo, y apoyas la mandíbula en la arena, empiezas a ver las cosas de otra forma. Por eso quizá a la gente le guste tanto ir a la playa, su manera de ver el mundo, cambia tirada en la toalla.
Bueno, no es necesaria esta postura para lo que te voy a contar, pero parecida. A veces, en las orillas de las playas se forman pequeñas islitas de agua. A lo mejor al irse una familia que provoca una hondonada, o porque unos niños decidieron escavar ahí la fosa de castillo de arena.
La cuestión es que si bajamos la vista a ras de esa lámina de agua, vamos a descubrir un espejo en el que reflejar a nuestro perro.
Agáchate doblando esas rodillas que el universo te ha dado, y baja tu cámara o teléfono para que esté un poco por encima del nivel del suelo.
Deja que tu perro circule entre el mar y la lámina de agua y fíjate como su reflejo aparece ante tus ojos. MAGIA.
Si consigues que tu perro no pise ese charco de agua, y que permanezca quieta sin alterarse, tendrás una superficie de espejo. Ahora ya céntrate en tu encuadre, que no se vean personas en el fondo.
Cuando empiece a atardecer, disfruta de las luces magentas reflejadas.
¡Es una foto de observación! La puedes hacer con móvil o cámara. Esto nos encanta, porque es una foto que solo la ven quienes «observan».
A veces la fotografía requiere de forma física, para esta parte, practicar la postura de Malasana es de mucha ayuda. Te dejo un vídeo para que veas lo que es aquí.
3 – Que corra hacia ti
Ir a la playa es una buena manera de fomentar el vínculo. Piensa que llevarlo a sitios que le gustan, que le prestes atención, y que te lo pases bien con él, para tu perro es lo más. Aprovecha y juega con él.
El pilla pilla es uno de los juegos favoritos del perro, así que no dudes practicarlo allí, y cuando venga hacia ti ZAS ¡Foto!.
4 – Colores y contraste
La superficie de la arena supone un fondo uniforme en cuanto a textura y color. ¡Menuda suerte! Es como ir a un estudio fotográfico, pero sin pagar. Utilízalo como si fuera un fondo de estudio, vigila qué aparece y qué no en el encuadre y fomenta la simplicidad. El minimalismo en fotografía atrae mucho.
El agua y la arena tienen colores complementarios. Si tu perro, como el mio, es del mismo color que la arena, tus fotos quedarán mas contrastadas cuando el perro esté mojado, contra el cielo, o dentro del agua. Juega con estos elementos y tu encuadre.

5 – Linea del horizonte
Cuando nuestros ojos mandan una imagen al cerebro, este hace un rápido escaneo, y una de las cosas que hace es ver qué elementos le son ya reconocidos. Es como la caché de nuestra mente. Digamos que hace asociaciones con cosas conocidas y esto facilita el que asimilemos una foto de forma positiva o negativa.
Cualquier cosa que nuestro cerebro piense que ha de estar recta, porque en el espacio físico, lo está, ha de estar recta en nuestra foto. En las playas pasa mucho porque es muy fácil que el horizonte salga en las fotos, y es también muy fácil que el horizonte salga torcido.
Fíjate mientras encuadras en esto, porque lo que no debería pasar es que si pones una pelota imaginaria en un extremo del encuadre sobre la línea del horizonte, ésta termine en el otro lado del encuadre rodando sobre un horizonte inclinado.
Ahora bien. Es de las cosas más fáciles de corregir en postproducción, desde la galería misma del teléfono lo puedes hacer. La herramienta de nivelar está por todas partes, así que en el momento de hacer la foto que no te produzca estrés, eso si, no imprimas en un álbum a doble página una foto con un horizonte torcido, da dolor de cabeza.
6 – Empieza a ver masas
Ya te lo adelantaba antes, pero si entrecierras los ojos y desenfocas tu vista, empezarás a verlo todo borroso, y es cuando ves como masas de textura y color.
En la playa, eso es lo que tenemos. 3 grandes masas:
- La arena
- El cielo
- El mar
Usa estas masas para equilibrar tu foto, para darle contraste, para rellenar el encuadre, para poner a tu perro… de forma que sean parte del escenario de forma deliberada para hacerle destacar.

7 – Espacios llenos de color
El último consejo de esta serie es que vivas un verano lleno de color. El verano a mi especialmente me llena de energía, de luz, y creo que es un momento de fotos de colores vibrantes, de ojos llenos de vida.
Me gustaría animarte a hacer fotos con luz natural, apuntando a la copa de los árboles y dejando que la luz pase entre las hojas.